BNP Paribás recibió multa por negociar con Cuba

La Habana, Cuba. – Ni siquiera el presidente francés fue capaz de evitar una estrafalaria multa dictada contra el banco BNP Paribás, por mantener relaciones financieras con Cuba.

Hace dos años, Hollande llegó hasta dirigirse a Obama para tratar de evitar la sanción, una muestra fehaciente de la extraterritorialidad del bloqueo contra Cuba.

Nada ha cambiado de allá hasta aquí y las presiones a terceros siguen siendo el pan nuestro de cada día como parte de la constante persecución contra todo lo que huela a cubano, aunque sea en el más lejano confín del planeta.

Así, un banco de Etiopía mantiene retenido el pago de los servicios prestados por un grupo de profesores de la enseñanza técnica y profesional.

Un poco más cerca, en Guatemala y Paraguay, técnicos cubanos dejaron de prestar colaboración en el área deportiva por no disponer de bancos en los que cobrar sus haberes.

Implacable acoso

Bancos de Italia, Alemania, Holanda y El Líbano han sido víctimas en los últimos meses de las disposiciones extraterritoriales del bloqueo.

Negación de pagos y hasta cuentas canceladas son algunas de las medidas que esas instituciones tomaron obligadas por las regulaciones del férreo cerco que ya dura más de medio siglo.

Lo cierto es que muchas entidades bancarias tienen miedo de mantener relaciones financieras con Cuba, porque a pesar de que las leyes del bloqueo son estadounidenses, Washington las aplica fuera de sus fronteras en clara violación del Derecho internacional.

La red legal tejida contra Cuba justifica un “modus operandi” que no tiene nada que envidiarle a aquellos asaltantes de bancos de lejano Oeste, solo que ahora para robar los bandidos han cambiado los revólveres por leyes espurias y extraterritoriales.