Responsabilizan a Bolsonaro por incendios en la Amazonía

La Habana, Cuba. – Mientras el Pulmón Verde del planeta es consumido por las llamas, la administración del presidente brasileño Jair Bolsonaro  está en ascuas por la tardía respuesta a un desastre de escala mundial.

Medios brasileños revelaron que el gobierno fue alertado de que un grupo de productores rurales iniciarían quemas en el departamento de Pará, uno de los siete que ahora sufren el avance de las llamas.

Esa sería parte de una manifestación en apoyo a la flexibilización del código ambiental que el gobierno impulsó para favorecer la deforestación en esa región y la eliminación de sanciones a las empresas que las concretan.

Es la evidencia de que en su rumbo neoliberal, Bolsonaro favorece a los hacendados que lo respaldaron para llegar al poder y que durante años han tratado de aumentar sus territorios a costa de comunidades indígenas y campesinas. 

Pagando favores

jair Bolsonaro llegó al Palacio de Planalto sobre los hombros de terratenientes geófagos que en muchos casos ejercieron la violencia para ampliar sus posesiones. 

No por gusto la ministra de Agricultura del gabinete de Bolsonaro es Tereza Cristina, una antigua lobista del agronegocio, y el de Medio Ambiente es Ricardo Salles, quien es investigado por alteración ilegal de un área protegida.

A punto de cumplir ocho meses en el poder, el actual gobierno brasileño está empeñado en aumentar el rol del país como potencia agrícola exportadora, pero sin detenerse a calcular el costo ecológico de una decisión que pone en riesgo a todo el planeta. Por eso, mientras los bosques arden en una verdadera catástrofe ambiental, cae en picada la popularidad del presidente Bolsonaro, cuya imagen también se quema en la Amazonía.