La Habana, Cuba. «Confieso que nunca sentí interés por la realización radial; una agenda, un bolígrafo, una pequeña grabadora y decidí probar, por el perfil tan singular de esta emisora y sus puntos de contacto con la prensa escrita y hasta con una agencia noticiosa».

Así se expresa Ileana González, reportera que, en 42 años de profesión, ha puesto todo su empeño en esta emisora, donde aprendió el secreto de la síntesis y bebió la sabia de verdaderos puntales del periodismo en Cuba.

En principio, me daban a redactar despachos cablegráficos de escasa trascendencia; mientras yo me batía con hallazgos de restos fósiles de dinosaurios, otros colegas tenían bultos de cables, siguiendo temas complejos del panorama internacional, comenta.

Perpleja ante aquel hecho, Ileana González pensaba: esos son los duros, y se decía: ahí debo llegar yo; así, poco a poco, fui dominando una técnica tan especializada, subraya.

Radio Reloj: Fuente confiable y útil

Ileana González recuerda que en las ruidosas y recias máquinas de escribir, había que colocar las dos cuartillas que irían a cabina, más una copia; apenas se admitían tachaduras o arreglos a mano.

El resultado quedaba a merced de los locutores, pero si tuviera que escoger, mencionaría a dos maestros: Pedro Luis Fernández Vila e Isabel Fernández Corrales, ¡una maravilla de la locución cubana!, subraya.

Destaca Ileana González que el avance de las nuevas tecnologías de la información han significado un cambio de época; hago una reverencia a aquellos que, antaño, se lucieron en su profesión sin contar con las viabilidades de Internet para hacer periodismo, enfatiza.

Seremos eficaces cuando los oyentes sigan acudiendo a esta emisora y cuando, en ese mar infinito que es Internet, sigamos siendo una fuente confiable y útil, resalta la reportera.