El 8 de enero de 1896, el Lugarteniente General Antonio Maceo cumpliendo órdenes del Generalísimo Máximo Gómez penetra en Pinar del Río para materializar los últimos tramos de la Invasión de Oriente a Occidente.

Dicho objetivo, se consideró como la hazaña bélica más audaz del siglo XIX, y consistió en llevar la lucha hasta el último confín de Mantua, poblado donde se firmó el acta capitular el 23 de enero de ese propio año.

El historiador de la ciudad de Pinar del Río, Juan Carlos Rodríguez Díaz dijo que durante el paso de la Invasión de Oriente a Occidente, el Lugarteniente General Antonio Maceo libró en vuelta bajo cuatro acciones combativas de renombre.

La primera fue la de Cabañas y después Las Taironas, el más cercano a una capital de provincia durante todo el recorrido aclaró Rodríguez, aunque hubo otros en Rio Seco y Palmar Amarillo.

Mantua, pueblo de historias.

El historiador Juan Carlos Rodríguez Díaz refirió que una vez la Invasión de Oriente a Occidente en la provincia de Pinar del Río, las tropas mambisas del Lugarteniente General Antonio Maceo fueron reforzadas por más de dos mil vueltabajeros.

Durante la marcha, se sumaron hombres como los hermanos Lazo muy anticipados a la llegada del mambisado oriental, aseveró el catedrático, pues fue en Guane durante la  penúltima etapa que Maceo saluda a la patriota Isabel Rubio.

Maceo conocía a Isabelita por sus acciones conspirativas contra el régimen colonial español y al día siguiente señaló el historiador, 22 de enero de 1896 Maceo al frente de la tropa partió hacia Mantua.

A su llegada repicaron las campanas y el pueblo salió a saludarlo confirmó el historiador, posteriormente  Maceo  distribuyó los cargos como parte del proceso organizativo de la guerra.