La Habana, Cuba. – Dice un viejo proverbio que una imagen vale más que mil palabras y me viene eso a la mente al ver esta fotografía captada en Johannesburgo, Sudáfrica.

Como un aldabonazo en medio de la noche, la imagen expresa el inconmensurable dolor de ver la pobreza extrema desafiando con creatividad la tragedia de una pandemia que avanza por el planeta sin control. Jamás una foto dice tanto.

Cuba, pobre y atenazada con un bloqueo inmoral e inhumano impuesto desde el norte brutal que nos desprecia, enfrenta con hidalguía a la Covid-19. Aquí nadie debe acudir a acciones tan extremas de protección como las de la foto, solo se les pide cumplir con las normas de aislamiento y la disciplina social, responsabilidad que algunos olvidan y han llevado a protagonizar situaciones complejas con la pandemia.

En Cuba no se puede encontrar una imagen como esta, el esfuerzo de muchos, en particular de los profesionales de la salud van venciendo a la Covid-19, por eso el concurso de todos es vital para controlar al virus.

Mientras algunos en otras latitudes tienen que recurrir a medidas extremas para desde la más profunda pobreza  enfrentar a la pandemia, en Cuba se necesita solo la cooperación y el responsabilidad individual.

Esta dura imagen solo nos recuerda el gran privilegio que tenemos en esta isla, donde jamás se encontrará una foto como esta que hiere el alma.