La Habana, Cuba.- Modificar la política de Estados Unidos hacia Cuba es una promesa del presidente electo, Joe Biden, pero tendrá facultades limitadas contra el bloqueo y debe enfrentar una legislación diseñada para perdurar.

La doctora en ciencias jurídicas Seida Barrera explicó que el núcleo de la política hostil contra la isla lo conforman varias leyes, como las Torricelli y Helms-Burton, que solo el Congreso estadounidense puede eliminar.

Según la experta, desde hace 6 décadas  Estados Unidos consideró que un sistema socialista podría atentar contra su posición de poder en la región, por lo que Washington optó por el bloqueo  para eliminar dicha amenaza.

Barrera aclaró que el presidente no tiene facultades para ordenar su derogación, sin embargo, puede suprimir órdenes, proclamaciones, notificaciones y determinaciones del ejecutivo relacionadas con ese cerco.

Etiquetas: - -