La Habana, Cuba.- El hecho de izar nuestra bandera, no es una ceremonia vacía de contenido, es identidad  y orgullo nacional, donde confluyen los sentimientos de unidad e igualdad de todo un pueblo.

De ahí, que emane para muchos una profunda pena cuando intentan profanar o ultrajar, con usos y expresiones inadecuadas, nuestros símbolos y atributos nacionales.

Conocer la significación patriótica de la Bandera y usarla correctamente, es penetrar en las raíces de nuestra nacionalidad, adentrarnos en nuestra historia y respetarla. No podemos olvidar que sobre la mentira de los que intentan mancillar nuestra nación está la grandeza del pueblo cubano, la victoria de la memoria histórica, la verdad y la justicia.

Levantemos la cabeza, con el pecho erguido de emoción cívica y admiremos nuestro “BANDERA” como estandarte nacional, del pabellón de nuestra patria.