La Habana, Cuba.- Hace hoy 55 años del alumbramiento de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, UNEAC, surgida en los albores de la Revolución y cuya misión sigue siendo crucial para los destinos del país.

Es una organización única de su tipo en el mundo, con más de nueve mil miembros avalados por una sólida obra artística o literaria.

Su artífice fue el líder dela Revolución, Fidel Castro, quien confirió al desarrollo y expansión de la cultura una marcada prioridad en las estrategias del proceso revolucionario, al ser pilar de la vida espiritual del pueblo.

En su histórico discurso conocido como Palabras a los intelectuales trazó los principios rectores de la política cultural de la Revolución, en cuya consolidación la UNEAC desempeña un papel fundamental siempre tomándole el pulso a la sociedad, consciente de que -como escribió José Martí- con pensamiento se ganan las batallas.

Defensa de la cultura cubana

La Unión de Escritores y Artistas de Cuba -ha dicho su presidente, Miguel Barnet- es un laboratorio de ideas, un nicho de debates y un sitio para promover lo mejor y más valedero de la cultura del país.

Esa ha sido su misión desde su nacimiento hace 55 años, arropada por el Poeta Nacional Nicolás Guillén y otras insignes figuras del arte y la literatura.

Pero podría decirse que tal vez ahora su responsabilidad social sea aún mayor, en un contexto particularmente complejo y decisivo, donde urge preservar los valores raigales de la cultura cubana, esos que la afincan y la hacen resistente.

La UNEAC sigue estando a la vanguardia en la defensa de los componentes que nutren y dignifican el alma de la nación, siempre apegados al pueblo.

 

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