La negación de visas es otra expresión de las barreras que Trump proyecta contra quienens intentan migrar hacia Estados Unidos

El Nuevo Herald comentó este sábado que Donald Trump en su cruzada anti-inmigrantes está cerrando las puertas hasta a personas que tratan de ingresar legalmente a los Estados Unidos.

Lo hace sin que el Congreso revoque ningún programa de visa plasmado en sus propias leyes. Al mismo tiempo, se ha incrementado el control gubernamental sobre las visas y las negativas para concederlas a viajeros que desean visitar Estados Unidos por distintas razones.

Los extranjeros que se encuentran en el país cuyos empleadores desean extender su visa también están enfrentando nuevos obstáculos.

Anastasia Tonello, presidenta de la Asociación Americana de Abogados de Inmigración (American Inmigration Lawyers Association, en inglés) dijo que a eso último le llama el muro que de verdad se está construyendo.

El Herald añadió que los cambios demuestran cómo Trump ejecuta sus planes sobre inmigración que llaman menos la atención.

Futuro escabroso para inmigrantes

Según el Herald, Trump, en su agresiva política migratoria, logra disminuir el número de personas que desean ingresar al país anualmente como trabajadores o residentes permanentes.

Así pone en práctica su filosofía de proteger el país del terrorismo y a sus trabajadores de la competencia extranjera. Incluso, los trabajadores migrantes que son elegidos enfrentan mayores exigencias.

Ahora los funcionarios están escudriñando detalles extras sobre la educación e historia laboral, el puesto a ocupar y el empleador.

Asimismo solicitan que el centro laboral presente muchos documentos adicionales, lo que resulta que la decisión sea más demorada.

Dado el incremento en las solicitudes de este tipo, el índice de aprobación ha ido disminuyendo. Lo que corrobora que en Estados Unidos, el futuro desvela más a los inmigrantes.