Todo comenzó en la Universidad de La Habana, en la escalinata, en la Plaza Cadenas, en el Salón de los Mártires.
Allí, bajo la sombra del Alma Mater, se formó Juan Nuiry para la lucha.
Falleció en octubre de 2013, mas dejó un legado como protagonista en las acciones del TRECE de marzo.
Varias responsabilidades ocupó en la Federación Estudiantil Universitaria, FEU, como la de secretario general, vicepresidente y presidente.
No fue casual la elección de Radio Reloj para comunicar el ajusticiamiento del tirano Fulgencio Batista en su propia madriguera, era la única estación de radio que daba noticias al minuto, nos dijo en una ocasión Juan Nuiry.
Cada hombre entrañaba una misión, cada grupo un plan a materializar. Llegó la orden, y los jóvenes revolucionarios, serenos pero activos, rápidos pero cautelosos, emprendieron la marcha hacia la definitiva eliminación de un régimen de oprobio.
Un mes de coraje
Durante su vida, Juan Nuiry repasó una y otra vez las imágenes vivas del Asalto al Palacio Presidencial y la toma de Radio Reloj.
De su mente no escapó nunca la figura de José Antonio Echeverría.
Era un extraordinario dirigente, que se formó en la universidad, que salió del aula, rompió el marco docente y se incorporó en el pueblo, decía Nuiry.
De acuerdo con el destacado revolucionario, dos fatalidades tuvieron las acciones del 13 de marzo, la primera: la interrupción de la alocución de José Antonio; la segunda: la pérdida de la cabeza directiva más importante de la acción.
Amigo, compañero y hermano, José Antonio Echeverría cayó simbólicamente junto a su querida Alma Mater, pero más que caer, se sembró en la historia, escribió Nuiry en uno de sus libros.
Un año de rebeldía
A pesar de un desenlace diferente al esperado, el Asalto al Palacio Presidencial y la toma de Radio Reloj demostraron el heroísmo de aquellos jóvenes estudiantes que dijeron: ¡Basta de injusticias!
Por unos minutos el tirano no fue ajusticiado, pero como dijo Juan Nuiry una vez: José Antonio y los muchachos del Directorio Revolucionario dejaron un legado. Y agregaba, la juventud de hoy enfrenta grandes desafíos, ellos tienen un compromiso con la Revolución: seguir adelante con nuestra única historia.
En el aniversario 60 de los hechos del 13 de marzo, patente está también el tributo a Juan Niury, uno de los protagonistas en aquellas acciones, y quien demostró que “se quiere más aquello que se ha conseguido con muchas fatigas”.